La babilla de ternera es uno de los cortes más solicitados en la carnicería. No es de extrañar, puesto que se engloba dentro de la categoría Primera A, es decir, está dentro de las de mayor calidad.

Cómo cocinar la babilla de ternera

La babilla de ternera se puede cocinar de múltiples maneras. La parte más cercana a la cadera se puede preparar tanto frita, como a la plancha, rebozada, guisada… cualquier preparación le va bien.

Sin embargo, la parte más cercana a la rodilla suele ser más seca, por lo que la mejor manera de cocinarla es guisada.

Receta fácil de babilla de ternera para Navidad

Preparar una receta navideña no tiene porqué ser difícil ni tedioso. Hoy en San Cayo os dejamos una receta deliciosa para estas fiestas: receta de babilla de ternera con salsa de espárragos trigueros.

Tomad buena nota:

Ingredientes para 4 personas

  • Babilla de ternera en medallones
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Sal
  • Pimienta negra recién molida
  • Una cebolla
  • Un diente de ajo grande o dos pequeños
  • 250 gramos de espárragos trigueros frescos
  • Medio litro de nata para cocinar
  • Un vasito de caldo de carne

Preparación de la receta

Primero comenzaremos con la salsa de espárragos:

  1. Lavamos bien los espárragos, los cortamos en trozos pequeños y los reservamos.
  2. Troceamos la cebolla y el ajo finamente y los echamos en una sartén con un chorrito de aceite de oliva virgen extra.
  3. Cuando estén pochados, añadimos los espárragos y salteamos hasta que queden bien hechos.
  4. Es el momento de añadir la nata y el caldo de carne (mejor si es casero). Cocinamos todo junto un par de minutos.
  5. A continuación, trituramos la salsa y la probamos de sal. Si es necesario, rectificamos para dejarla a nuestro gusto.
  6. Dejamos que se cocine todo junto y reduzca hasta que logremos la textura que nos gusta en las salsas.
  7. Una vez lista, reservamos.

Para preparar la babilla de ternera:

  1. Salpimentamos la carne y la hacemos a la plancha. Un buen truco es rebozar el borde de la carne en una mezcla de pimienta negra molida y especias como el tomillo. Si no, bastará con salpimentarla de modo tradicional y pasarla por la plancha o sartén.
  2. Aquí tenemos dos opciones:
    • Preparar la carne en el momento justo antes de servirla, dejándola al gusto de cada comensal.
    • Prepararla por la mañana, mientras dejamos otras elaboraciones listas, y calentarla antes de servirla. En este caso, marcaremos la carne a fuego muy fuerte durante unos instantes, lo justo para que se marque bien y la reservaremos. Cuando vayamos a servir el plato, solamente tendremos que darle un «calentón» mientras calentamos también nuestra salsa de espárragos trigueros.
  3. Servimos los filetes acompañados de la salsa de espárragos.
  4. Para los más patateros, puede quedar bien unas patatas fritas caseras al estilo rústico.
  5. Opcionalmente, podéis conservar las puntas de los espárragos o algún espárrago entero para utilizarlos a modo de decoración.

¡¡A disfrutar!!