Precauciones con la carne de pollo en verano

En verano buscamos comidas fáciles de preparar, ligeras y deliciosas. Estas tres características suelen cumplirse en las recetas de pollo. Sin embargo, es importante tener en cuenta una serie de precauciones con la carne de pollo en verano. Os las contamos en Carnicería San Cayo.

El pollo, entre las carnes favoritas

La carne de pollo es una de las más consumidas en nuestro país. Además de poseer un sabor que suele gustar a todo el mundo, la carne de pollo es muy versátil y permite muchísimas elaboraciones diferentes.

Por otra parte, es una carne que aporta pocas calorías, pero muchos beneficios nutricionales. Por todo ello su consumo es muy atractivo para todo tipo de consumidores.

Indicaciones a tener en cuenta en verano

Correcto empaquetado

Al comprar carne de pollo, nuestro carnicero de confianza debe empaquetarla cuidadosamente. El objetivo es evitar que los jugos de la carne contaminen otros alimentos.

Conservación en la nevera

Cuando lleguemos a casa, no debemos conservar el pollo más de dos días en la nevera en crudo.

Higiene al manipularlo

En el momento en que se vaya a manipular el pollo crudo, al igual que con los demás alimentos, es imprescindible lavarse bien las manos con agua y jabón.

Cómo cortar el pollo

Una de las precauciones con la carne de pollo en verano es el momento del corte. Si tenemos que cortar la carne, lo haremos en una tabla especial para el pollo. No debemos cortar otros alimentos en la misma tabla.

Recordad que el material de la tabla no debe ser de madera, puesto que las bacterias son más difíciles de eliminar.

No lavar el pollo

Nunca, insistimos, nunca se debe lavar el pollo crudo antes de cocinarlo. Si lo hacemos, corremos el riesgo de que las posibles bacterias existentes se propaguen por toda la carne.

Carne bien cocinada

Esta es quizá la más importante de las precauciones con la carne de pollo: siempre debe estar bien cocinada. No nos referimos a que la dejéis más seca que la mojama. Existen métodos para que la carne quede hecha y jugosa.

Si disponéis de un termómetro de cocina, vigilad que el interior de la carne quede al menos a unos 75ºC. Esto la convertirá en un bocado seguro para nuestra salud.

Conservar bien los restos

En caso de que queden restos de pollo, éstos deben guardarse lo antes posible en la nevera. Así evitaremos la proliferación de bacterias y agentes contaminantes.

Comprar carne de pollo

Ahora que ya conocéis los trucos indispensables y precauciones a tomar con la carne de pollo cuando el calor aprieta, solamente queda comprar la mejor carne de pollo.

En Carnicería San Cayo os ofrecemos muchísimas alternativas en nuestra sección de pollería. Desde pollo entero a pechugas, alitas, muslos, hamburguesas, marinados…

Triunfa este verano con la mejor calidad en tu mesa y estos pequeños consejos.